
- •10 Экзаменационный материал по «практикуму» (4 курс, 7 семестр) 2011-2012
- •¿Las peores universidades del mundo?
- •Profesores sin sueldo, aulas sin computadoras
- •¿Hay que subsidiar a los ricos?
- •En China comunista, los estudiantes pagan:
- •Entran casi todos, pero terminan pocos
- •El auge de los estudiantes extranjeros
- •Sobran psicólogos, faltan ingenieros
- •La unam: modelo de ineficiencia
Sobran psicólogos, faltan ingenieros
Por increíble que parezca, en la UNAM se gradúan quince veces mas psicólogos que ingenieros petroleros por año. Efectivamente, en un país donde el petróleo continúa siendo una importante industria, UNAM produce unos 620 egresados con licenciatura en Psicología, en Sociología y sólo 40 en Ingeniería Petrolera por año. Y México dista de ser un caso aislado. En la UBA, de la Argentina, se reciben 2.400 abogados por año, 1.300 psicólogos, y apenas 240 ingenieros y 173 licenciados en Ciencias Agropecuarias. El Estado está produciendo cinco veces más psicólogos que ingenieros. Si examinamos la población estudiantil en general, y no sólo los egresados, los datos son más asombrosos aún: en el momento de escribirse estas líneas, en la UNAM ha 6.485 estudiantes de Filosofía y Letras, y apenas 343 estudiando Ciencias de la Computación. En total, el 80 por ciento de los 269 mil estudiantes de la UNAM están siguiendo carreras de Ciencias Sociales Humanidades, Artes y Medicina, mientras que sólo el 20 por ciento estudia Ingeniería, Física o Matemática.35 En muchos casos, la falta d conexión entre los programas educativos y las necesidades del merca do laboral hace que las grandes universidades estén produciendo legiones de profesionales desempleados. Un estudio de la Asociación Nacional de Universidades Mexicanas e Instituciones de Educación Superior (ANUES) advierte que si México no hace algo para corregir si sobreproducción de graduados universitarios sin potencial de trabajo se encontrará muy pronto con 1,5 millones de profesionales desemplea. dos. “Esto podría generar un problema social sin precedentes”, dice e estudio.
En la Argentina, el 40 por ciento de los 152 mil estudiantes de la UBA está matriculado en Ciencias Sociales, Psicología y Filosofía, mientras que sólo el 3 por ciento estudia carreras relacionadas con la computación, Física y Matemática. En estos momentos, hay unos 27 mil estudiantes de Psicología en la UBA, contra apenas 6 mil que cursan Ingeniería. “En la Argentina, hasta el año 2003, se graduaban sólo 3 ingenieros textiles por año”, me comentó el ministro Fimus, con horror. En las universidades más grandes de Brasil, el 52 por ciento de los estudiantes está matriculado en Ciencias Sociales y Humanidades, mientras que sólo el 17 estudia Ingeniería, Física y Matemática, según el Ministerio de Educación. “En vez de invertir tanto en formar más abogados, los gobiernos latinoamericanos deberían invertir en la creación de escuelas intermedias e institutos técnicos”, dice Eduardo Camarra, profesor de Ciencia Política y director del Centro tic Latinoamérica y el Caribe de la Universidad Internacional de La Florida. “Las economías latinoamericanas van hacia industrias con mayores requerimientos tecnológicos, para producir exportaciones de mayor valor agregado. Necesitan mas técnicos y menos licenciados en Ciencia Política”.
La unam: modelo de ineficiencia
El rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, se fue por la tangente cuando le pregunté en una entrevista televisiva si no le parecía absurdo que su universidad estuviera creando tantos filósofos y tan pocos ingenieros. “Mire, Andrés, lo primero que me gustaría puntualizar es que la UNAM realiza el 5O por ciento de toda la investigación que se hace en México. La UNAM ha venido desde hace muchísimos años impulsando el desarrollo de la investigación científica, que en México se hace fundamentalmente en universidades públicas”, dijo el rector.
¿Cómo no va a ser así, si el Estado mexicano —o sea, los contribuyentes— otorga 1.500 millones de dólares anuales a la universidad?, pensaba yo, mientras lo dejaba hablar. ¿Cómo no va a ser así, cuando la UNAM se lleva el 30 por ciento del presupuesto nacional para educación superior, que cubre las 99 universidades públicas del país? ¿Y cuánto de ese dinero queda para dar una educación adecuada a los estudiantes de la universidad? De la Fuente continuó hablando sin parar. “Creo que el problema radica fundamentalmente en que no ha habido en México una política de Estado con una visión de mediano y de largo plazo que nos hubiese permitido, como ocurrió en algunos de los países de la cuenca del Pacífico, tener un desarrollo que hubiera resultado mucho más fructífero”, dijo.
“No le está usted pasando la pelota al Estado?”, le pregunté, luego de varios intentos vanos por hacer una pregunta. “ANo es responsabilidad de la universidad complementar los ingresos que recibe del Estado con otras fuentes de financiamiento? Porque, fíjese, por ejemplo, el número de científicos e ingenieros por millón de habitantes en varios países: Finlandia tiene 5 mil científicos e ingenieros por millón de habitantes, la Argentina 713, Chile 370, y México solamente 225. O sea, menos que nadie.”
“La inmensa mayoría formados en la UNAM”, respondió el rector. Acto seguido, le pasó la pelota nuevamente al Estado. “Está faltando en México una política de Estado, para que puedan concurrir universidades, sector privado y el propio Estado, que no debe eludir responsabilidad. Porque una sola institución, insisto, por más que tenga un compromiso como lo ha tenido la UNAM con la ciencia, es imposible que pueda ser el detonante de todo el desarrollo. Se necesita, Andrés, una visión de mediano y de largo plazo, porque la inversión en ciencia no es una inversión rentable de inmediato. Estamos metidos todo el tiempo en la coyuntura.”
Hummm. Quizá De la Fuente no tenía el respaldo del gobierno para hacer reformas profundas, o quizá no tenía la valentía intelectual, para hacerlas, o quizá ni siquiera era consciente de la necesidad ¿hacerlas, pero lo cierto es que el rector de la UNAM estaba —como mayoría de sus colegas— desviando responsabilidades. Que la UNAM estaba recibiendo 1.500 millones de dólares anuales para enseñar a 26 mil estudiantes, mientras que Harvard estaba recibiendo 2.6 millones para enseñar a apenas 20 mil estudiantes. ¿Por qué Harvard tiene tantos recursos más? Porque mientras la UNAM pide más dinero d Estado, Harvard recauda generosas donaciones de sus ex alumnos, cobra a los estudiantes que pueden pagar y firma millonarios contrate de investigación con el sector privado y el Estado, que favorecen a todas las partes.
Lo cierto era que la UNAM es ineficiente por donde se la mire. Decenas de miles de sus estudiantes transcurren siete o más años en sus aulas, aumentando enormemente los costos de la enseñanza. El ex regente de Ciudad de México, López Obrador, por ejemplo, transcurrió nada menos que catorce años en la UNAM, según reportó el periódico Reforma basado en documentos de la universidad Y la negativa de la universidad a someter sus carreras a una evaluación externa, como la mayoría tiene las demás universidades mexicanas, es escandalosa.
Según me explicaron funcionarios de la Secretaría de Educación es ni resultado de la huelga estudiantil de 1999. “Al final de la huelga, uno de los acuerdos fue que la UNAM rompió relaciones con el (instituto acreditador) CENEVAL bajo el argumento de que es un organismo neoliberal vinculado a empresas privadas”, explicó Rubio el subsecretario de Educación. En 2005, el 66 por ciento de las universidades públicas y privadas de México, incluyendo el Tecnológico de Monterrey y la Universidad del Valle de México, ya habían aceptado ser evaluadas por la CENEVAL.
Incluso dentro de la UNAM, la negativa a la evaluación externa causó tanto rechazo en ciertos sectores, que algunas de las carreras más prestigiosas de la universidad —como Ingeniería— se rebelaron contra la mediocridad de las autoridades centrales y pidieron someterse a la evaluación externa. Otras, como Medicina, lo que hicieron a la fuerza, porque el gobierno dictó una norma oficial exigiendo estudiantes de esa carrera se formaran en escuelas acredita asegurar que no se estuvieran graduando médicos improvisados. Pero en la tabla de universidades mexicanas con carreras acreditada por el organismo independiente autorizado por la Secretaría de Educación en 2005, la UNAM estaba al final de la lista: mientras que la Universidad Tecnológica de Tlaxcala tenía el 100 por ciento de sus carreras de licenciatura acreditadas, la UNAM apenas tenía un 22 por ciento de sus carreras en esa situación. ¿Conclusión? “La UNAM figura muy alto en investigación, pero eso no se refleja en sus programas”, me dijo Rubio. “Desde el conflicto de 1999, la UNAM ha perdido mucho su calidad y su imagen.”
ЗАДАНИЕ: Данная статья была выслана студентам 4 курса (7 семестр, испанский язык) по электронной почте преподавателем в сентябре 2011, в рамках прохождения темы «Образование в Испании и Латинской Америке». Для успешной сдачи устного экзамена по курсу «Практикум второго иностранного языка (испанский)» статью необходимо прочитать, перевести, детально ознакомиться с каждым вопросом, изложенным автором. На экзамене студенты получат разные вопросы по содержанию статьи, а так же переводу некоторых фрагментов. В этой связи, подготовка должна быть индивидуальной.