36. Los numerales

Las gram?ticas suelen distinguir en las lenguas los numerales ordinales los cardinales, los distributivos, los multiplicativos y los partitivos. Los m?s importantes y generales son los cardinales y los ordinales.

El contenido significativo de los numerales cardinales es demasiado evidente para que tengamos que insistir: uno. dos, ocho, diez. etc. Por lo que respecta a sus funciones, puede decirse que tienen un valor adjetivo fundamental. S?lo cuando nos referimos al n?mero por s? mismo - el cinco, el seis etc. - nos encontramos ante verdaderos sustantivos. En los dem?s casos el numeral cardinal tiene un valor puramente adjetivo o sustantivado: as?, por ejemplo, la palabra seis tiene un valor puramente adjetivo en seis muchachas y de adjetivo sustantivado en las seis (horas); en este caso ya sabemos a qu? sustantivo se refiere el numeral. Si nos fijamos en la lengua espa?ola, veremos que los cardinales funcionan como los adjetivos calificativos: como ellos se sustantivan por medio del art?culo. Debido a su car?cter esencialmente determinativo, los numerales cardinales no se posponen nunca al sustantivo . en muchas lenguas, como el espa?ol.

Los ordinales se confunden ya con los adjetivos calificativos. En efecto, ser primero o ?ltimo se nos aparecen como verdaderas cualidades en sentido gramatical, y, desde un punto de vista formal, estas palabras se combinan con los mismos morfemas que los adjetivos calificativos. En espa?ol se anteponen o se posponen al sustantivo, como nuevo o grande, por ejemplo. En cambio, los cardinales no solamente rehusan la posposici?n, sino que son formas invariables ante los morfemas de g?nero, con la excepci?n de uno y las centenas y. naturalmente, al n?mero, puesto que uno en plural, seg?n la gram?tica tradicional, se convierte en indefinido.

Los distributivos son afines a los ordinales en muchos aspectos: los partitivos se hallan en el mismo caso; los m?ltiples y colectivos, en cambio, son verdaderos sustantivos, aunque con ciertos rasgos peculiares.

Al examinar el numeral como n?cleo del SN, podemos subrayar que los adjetivos numerales se usan tambi?n como pronombres, con excepci?n de las formas sendos y cada:

Un cuarto de hora son quince minutos - numeral partitivo;

Tengo tres hijos: dos son ni?os y una es ni?a - dos cardinales:

Ambos lo saben. Vinieron muchos: Los primeros vinieron a las cuatro.

Ambos, muchos - son distributivos, los primeros - es ordinal, las atro~ es cardinal.

37. Premodificador y postmodificador del sn

Premodificador

En la estructura del SN el PREM ocupa el lugar entre el DET y el N?CLEO. El DET es una funci?n facultativa, el n?cleo es obligatorio: Las grandes ciudades del mundo; malos tiempos.

El PREM tiene la forma de un adjetivo que generalmente va s?lo en la lengua escrita, sin compa?amiento de un adverbial. En la lengua hablada en cambio, existe la posibilidad de a?adir al adjetivo un adverbio intensificador: Los muy interesantes versos; Los m?s interesantes cuentos

Resulta que no es el adjetivo solo sino el sintagma adjetivo (SADJ) el que funciona como PREM. El intensificador muy, m?s lleva un acento fuertemente contrastivo en la pronunciaci?n. El PREM es facultativo en la estructura del SN. Si se halla presente, su significaci?n se extiende no s?lo al n?cleo, sino al n?cleo y a los POM eventuales: los excelentes vinos tintos de Crimea. El PREM excelentes no se refiere s?lo a vinos, sino al conjunto vinos tintos de Crimea. En este ejemplo figura tambi?n un adjetivo pospuesto, tintos, que funciona como POM. Veamos la diferencia sem?ntica entre la posici?n antepuesta y pospuesta del adjetivo respecto al n?cleo.

Postmodificador

El POM se coloca inmediatamente detr?s del n?cleo del SN. En funci?n de POM se emplea no s?lo el adjetivo sino tambi?n otras categor?as: El libro grueso -SADJ; El libro de Juan - SPREP;

El libro que compr? hace poco - proposici?n relativa; la t?a Elena-SN.

Algunos adjetivos pronominales y numerales aparecen en la posicion del POM bajo determinadas condiciones:

- Este (ese, aquel) chico; El chico este (ese, aquel) - el adjetivo

demostrativo pospuesto al n?cleo del SN tambi?n adquiere un

?nfasis especial que puede conceder al adjetivo un sentido

peyorativo, de desprecio;

- Quince siglos; El siglo quince - los numerales cardinales y

ordinales se posponen para indicar un orden o sucesi?n de siglos,

cap?tulos, reyes, etc. (el primer siglo - el siglo primero);

- La misma chica; La chica misma - el adjetivo misma en la posici?n del DET tiene sentido demostrativo de identidad, y en la posici?n del POM tiene sentido de adjetivo reflexivo e intensivo.

61. Aspectos semanticos del PREM y POM del nucleo del SN

El POM a?ade una restricci?n respecto al nombre. Esto quiere decir que limita los posibles significados de este. En los ejemplos: El libro grueso, de Juan, que compr? hace poco el significado amplio de el libro se reduce al objeto a que corresponden las caracter?sticas mencionadas en el POM.

La significaci?n del PREM no es restricta o especificativa y por eso no limita la significaci?n del nombre.

El adjetivo pospuesto ocupa la posici?n normal de los elementos oracionales. El orden lineal se refiere a) hecho de que los elementos de la oraci?n se colocan uno tras otro. El criterio que regula esta colocaci?n es que el elemento que determina esta detras del elemento que es determinado. El adjetivo antepuesto al nombre determina una ruotura del orden lineal y normal. Su posicion concede al adjetivo un valor explicativo o subjetivo.

El SADJ pospuesto - en funcion de POM – tiene significacion especificativa y el SADJ antepuesto – en funcion de PREM – la explicativa. La significacion especificativa del SADJ formula una restriccion respecto al significado general del nucleo.

Los bosques espesos de los Carpatos.

Los espesos bosques de los Carpatos.

En 1 los dos POM limitan la significacion amplia de los bosques. Por eso se afirma que que el POM expresa parcialidad. En 2 espesos es el PREM, da una cualidad propia y conocida de los bosques. Ahora se puede decir que el adjetivo expresa totalidad.

En algunos casos la colocacion ante el nucleo del SN provoca un cambio de significado en el adjetivo. Es una consecuencia del uso subjetivo y afectivo del adjetivo

Juan es un chico pobre.

Juan es un pobre chico.

1 – sentido objetivo y literal, 2 – sentido subjetivo, significado figurado.