6. A ver si te has fijado en los detalles. Completa las frases:

Papá Noel no pudo ir de vacaciones porque .... Papá Noel se puso
Miró a su alrededor y se dio cuenta de que ... . En todas las casas sucedía lo mismo: ... . Más de una vez tuvo que volver a la chimenea
porque ... . Una familia llamó a la policía pues ... . Para repartir todos
los regalos Papá Noel ... Papá Noel se sentía emocionado porque ... .

7. Ordena las frases haciendo el plan de todo el cuento.

1) Papá Noel decidió venir a repartir regalos en julio.

2) Papá Noel se atascó en la chimenea.

3) Julio llegó pronto.

4) El reno Rodolfo recibió la orden de ponerse en camino.

5) Papá Noel se vistió bien para salir.

6) Papá Noel se puso su camiseta, vaqueros y sandalias.

7) "En futuro pienso hacer regalos en la Nochebuena".

8) Miró a su alrededor y se dio cuenta de que algo no andaba bien.

9) Papá Noel se sentía muy emocionado.

10) "Un ladrón — dijeron por teléfono. — Y creemos que hay otro en el tejado".

8. Relata el cuento de parte de:

1. Papá Noel. Puedes empezar así:

Ya llevo muchos años trabajando de Papá Noel. Pero un año me sucedió
una historia humorística. Había una vez...

1. El reno Rodolfo. Puedes empezar así:

Ya sabéis que sirvo a Papá Noel ya hace muchos años. ¡Cuántas aventuras tuvimos juntos! Pero a menudo me acuerdo de una Navidad...

9. Ahora que has leído el cuento hasta el final, puedes decir cuáles son las ventajas y las desventajas del trabajo de Papá Noel. ¿Te gustaría trabajar de Papá Noel? ¿Por qué?

1. Lee el fragmento de la novela de Laura Esquivel que se da a continuación fijándote en qué significaba para Tita, una chica mexicana, la noche del 6 de enero.

En el rancho de mamá Elena la preparación de la tarta de Navidad y de la rosca de Reyes era
un rito. Todas las mujeres de la familia tenían que participar: mamá Elena, sus hijas Gertrudis,
Rosaura y Tita, Nacha la cocinera y Chencha la sirvienta. Se sentaban por las tardes a la
mesa del comedor y entre conversaciones y bromas el tiempo se iba volando hasta que
empezaba a oscurecer. Pasaron muchos años. Cada vez que cerraba los ojos Tita podía revivir
muy claramente estas escenas. Su mayor preocupación de aquel tiempo era que los Santos
Reyes nunca le traían lo que ella pedía, sino lo que mamá Elena pensaba que sería lo más
adecuado para ella.

Según la tradición, la noche del 6 de enero se parte la rosca y la persona que saca un muñeco
que viene escondido dentro de ella queda obligada a celebrar una fiesta el 2 de febrero, día de
la Candelaria, cuando hay que levantar el nacimiento del niño Jesús. Desde que eran muy
niñas esta tradición se había convertido en una especie de competencia entre ella y sus
hermanas.

Se consideraba muy afortunada a la que tenía la suerte de quedarse con el muñeco. Por la
noche podría pedir un deseo apretándolo fuertemente con las manos. En la preparación de la
rosca de Reyes con chocolate como la de las tartas de Navidad tomaba parte toda la
familia. Los invitados estaban esperando con impaciencia el momento de partir la rosca y
tomar una buena taza de chocolate recién batido. En la casa de Tita lo hacían como nadie.
Este chocolate estaba preparado como en los viejos tiempos. Nadie menos Tita tenía los
conocimientos de hacer el chocolate.

Hoy estaban invitados a comer John y su tía Mary, que había venido de Pensilvania sólo para
asistir a la boda de Tita y John.

Darle una buena comida a la tía Mary era lo menos que Tita podía hacer por la anciana (ya tenía
80 años) y por John.

Tita recibió a John y a su tía en la sala. La tía quedó encantada con Tita y felicitó ampliamente a
su sobrino por su elección y a Tita por el perfecto inglés que hablaba. A la tía la encantó el
arroz con plátanos fritos y elogió muchísimo el arreglo de frijoles.

- Qué suerte tienes Jonny, de ahora en adelante sí vas a comer bien. Hasta vas a engordar con
el matrimonio.